La Ciudad de Carlomagno
Después del crucero pasamos la frontera del Estado de Renania-Palatinado. La luna llena ilumina el cielo alemán del ocaso. Entramos al Estado de Hesse. Su ciudad más poblada es mi destino, Frankfurt. Poco puedo escribir sobre la capital financiera de la Unión Europea pues solo estuve un breve tiempo, poco más que suficiente para cenar y dormir un poco. Frankfurt am Main se encuentra asentada a orillas del río Main.
Es de noche. Mi punto de interés principal es el famoso Eiserner Steg o "Puente de Hierro". Se trata de un puente peatonal de estilo neogótico. Este puente cuenta con un ascensor para acceder al caminamiento. Desde acá puedo ver las imponentes torres EuroTower, donde se encuentra la sede del Banco Central Europeo (BCE).
También logro ver la torre principal de la Paulskirche, la Iglesia de San Pablo.
Los grandes rascacielos no faltan en esta ciudad alemana. Tengo una buena vista del Frankfurt Skyline y la Commerzbank Tower.
De camino al punto de reunión para la cena encuentro lo más esperado y quizás icónico de Alemania para mi, Hanz & Franz, un puesto de salchichas. ¡Llevo más de 12 horas en Alemania y no he probado una bratwurst de cerdo!. Por fin la tengo ante mí, dos grandes salchichas blancas con sauerkraut y mostaza.
La cena es en el famoso Ratskeller. Se trata del sótano de uno de los edificios del Ayuntamiento, adecuado para banquetes. Una cena buffet con variedad de ensaladas, carnes de caza y crianza, y lo que no puede faltar en Alemania: salchichas y cerveza.
Alemania, famosa por sus variedades de cerveza me ofrece la auténtica cerveza negra Schwarzbier de Köstritzer. En el bar del NH de Moerfelden.
Después de estas delicias me dirijo a dormir para continuar mañana hacia Heidelberg y Suiza.
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